Catar condenó los ataques y asegura que «se reserva el derecho a responder directamente» a Teherán.
Este lunes, en una escalada directa del conflicto en Medio Oriente, Irán lanzó un ataque con misiles contra bases militares de Estados Unidos ubicadas en Qatar e Irak, en represalia por los recientes bombardeos estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes.
La operación, denominada por Teherán como “Anuncio de la Victoria”, incluyó el lanzamiento de seis misiles contra la base aérea de Al Udeid en Catar, la mayor instalación militar de EE. UU. en la región, y otro ataque contra la base de Ain al-Asad en Irak. La base de Al Udeid había sido evacuada previamente como medida de precaución, y no se reportaron víctimas.
En Irak, también se activaron sistemas defensivos, aunque aún se evalúan los daños. La embajada de EE. UU. en Doha había emitido alertas a sus ciudadanos horas antes del ataque, instándolos a refugiarse.
Catar condena los ataques
El Estado de Catar condenó «enérgicamente» el ataque lanzado por la Guardia Revolucionaria de Irán contra la base aérea de Al-Udeid, calificándolo como una «violación flagrante» de su soberanía, de su espacio aéreo, del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas. Catar afirmó que se reserva el derecho a responder directamente.
«Qatar se reserva el derecho a responder directamente de forma equivalente a la naturaleza y la magnitud de esta descarada agresión, de conformidad con el derecho internacional», aseguró Majed Al Ansari, vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores del país árabe.
Asimismo, informó que las defensas aéreas cataríes interceptaron exitosamente los misiles iraníes, y que no hubo víctimas ni heridos, ya que la base fue evacuada previamente como medida de precaución. Se espera un informe más detallado por parte del Ministerio de Defensa.
Además, Catar advirtió que la continuación de acciones militares como estas amenaza la seguridad regional e instó a detener inmediatamente las hostilidades y volver al diálogo. Subrayó que ya había alertado sobre el riesgo de una escalada provocada por Israel y reiteró que la única salida sostenible es diplomática, basada en el respeto mutuo y la buena vecindad.
«También destacamos que la continuación de tales acciones militares en escalada socavará la seguridad y la estabilidad en la región, arrastrándola a situaciones que podrían tener consecuencias catastróficas para la paz y la seguridad internacionales», agregó.









